lunes, 24 de febrero de 2020

Amueblando -con diseño- el cómic


La representación de la arquitectura en un cómic es fundamental para hacer creíbles las aventuras que en él se desarrollan, pero también lo es la del espacio interior para la mejor caracterización de las escenas.

Y si bien muchos dibujantes han resuelto estos aspectos recurriendo a imágenes urbanas estereotipadas o a la reproducción de tradicionales ambientes domésticos, siempre se han dado magníficas incorporaciones del diseño moderno en las ilustraciones.

Buen ejemplo de ello es la presencia en una página de Le lotus bleu, publicado entre 1934 y 1936, de una secuencia de viñetas en las que Hergé -seudónimo de Georges P. Remi- representa el interior de un café amueblado con las sillas "MR 10" diseñadas por L. Mies van der Rohe en 1927. No deja de sorprender tal detalle ya que, excepto en contadas ocasiones, Hergué no manifestó a través de sus dibujos una especial querencia por “las vanguardias”.


Viñeta de Le lotus bleu. (Tintín, 1934-36) y Mies van der Rohe sentado en la silla " MR 10". 1927 (Foto: W. Blaser)

Pero será en los años 50-60 cuando en el cómic franco-belga  dibujantes como Franquin, Will y Jijé entre otros, incorporen con total naturalidad muebles de estilo “mambo”o “atomium” de gran difusión en Europa en esas décadas. Mientras, en nuestro país la representación de "lo moderno" se movía entre la amable caricatura y la literal "imitación" de las ilustraciones centroeuropeas.


Viñeta de Spirou et Fantasio (Franquin)
Viñeta de Tif et Tondu. Le retour du choc (Will, 1956)
Viñeta de Valhardi contre le soleil noir (Jijé, 1956)

Sofás-canapés articulados, aerodinámicos sillones, estilizadas lámparas de pie, aparadores de puertas correderas  y acabados laminados, mesas con patas “bambi”, etc., diseñados por O. Borsani, M. Zanuso, J. Prouvé, Ch. y R. Eames, C. Braakman, I. Noguhi, etc., se combinan con telas de dibujos geométricos, esbeltos filodendros, jarrones y esculturas biomórficas y todo tipo de objetos que nos hablan de la nueva sociedad de consumo.


 Canapé D 70 (O. Borsani, 1954), Coffe Table (I. Noguchi, 1944), Sillón 720 Lady (M. Zanuso, 1951), Lámparas Diábolo 

A partir de los años 80, jóvenes ilustradores con estudios en arquitectura o diseño, como T. Benoit o el español D. Torres, introducen en sus dibujos, a modo de sutil reconocimiento, citas literales a espacios emblemáticos de la arquitectura (por ejemplo los interiores del Unity Temple de F. Lloyd Wright y de la Maison du verre de P. Chareau) a la vez que vuelven la mirada a los muebles de las primeras décadas del siglo XX, convertidos en objeto de culto y motivo de distinción social.


Viñetas de Opium  (D. Torres, 1986) y de Cité Lumiere (T. Benoit, 1986)


Esta actitud es evidente en la espléndida “novela gráfica” Asterios Polyp (2009), obra de D. Mazzucchelli, en la que su protagonista masculino, arquitecto y profesor, vive en un apartamento que es un verdadero catálogo de muebles "de autor" (L. Mies van der Rohe-L. Reich, E. Gray, I. Noguchi, Le Corbusier-P. Jeanneret-Ch. Perriand, M. Breuer, J. Prouvé, Ch. y R. Eames y G. Nelson) ...


Viñeta de Asterios Polyp (D. Mazzucchelli, 2009)  

... hasta la llegada de Hana, protagonista femenina y escultora, que sustituye la mesa de centro “Barcelona” (1929) de L. Mies van der Rohe por una mesa con forma de riñón, “un pseudo-alguien”, según Asterios. 


Viñetsa de Asterios Polyp (D. Mazzucchelli, 2009)




lunes, 17 de febrero de 2020

Carnaval de arquitectos. Arquitectos de carnaval


El 23 de enero de 1931 la Society of Beaux Arts Architects de Nueva York organizó su baile anual bajo el lema “Fête Moderne: a fantasy in flames and silver” (Fiesta moderna: una fantasía en llamas y plata).

Al mismo acudió un grupo de 7 arquitectos ataviados con trajes y tocados que hacían referencia a conocidos edificios de los que eran autores. Su conjunto se presentó como “La silueta de Nueva York” con gran éxito social.

Y si bien su fotografía fue comentada en este mismo blog dentro del texto titulado “Edificios figura(do)s”, la proximidad de la fiesta del Carnaval merece recuperarla.

Los arquitectos y sus “vestimentas” eran, de derecha a izquierda: A. Stewart (Edificio Fuller), L. Schultze (Waldorf-Astoria), Ely J. Kahn (Edificio Squibb), W. van Allen (Edificio Chrysler), R. Walker (Edificio One Wall Street), D. E. Ward (Metropolitan Tower) y J. H. Freelander (Museo de Nueva York)

En 1985 el ilustrador Joost Swarte realizó el cartel de la exposición Architectures de bande dessinée organizada por el Institut Français d´Architecture, representando a 4 personajes con unos edificios en la cabeza, en lo que sin duda era un guiño a la famosa fotografía de 50 años antes.

En el primero se reconoce  la figura de Le Corbusier rematada con una “villa racionalista”, le sigue una joven que se adorna con una casa post-modern, después va un ¿promotor-ejecutivo? con su maletín y una torre de viviendas de sombrero, y cierra una señora con las bolsas de la compra en la mano que se cubre con un bloque lineal de viviendas sociales del tipo HLM (Habitation à Loyer Modéré).

Con la duda de la fecha en que se realizó la siguiente fotografía, los Five architects, en este caso sólo 4, se nos presentan "vestidos" con sus arquitecturas. El quinto, J. Hejduk, quizás fuese el autor de la fotografía.

Architectures de bande dessinée. Le Corbusier, una joven, un promotor y una ama de casa.
Five architects.  M. Graves con su Humana Tower, Ch. Gwathmey y la casa de sus padres, R. Meier con alguno de sus edificios blancos Y P. Eisenman con Max Reinhardt Haus.

Unos años más tarde, la revista Vanity Fair (“La feria de la vanidad”), bonito nombre para la ocasión, publicó en 1996 un reportaje fotográfico de J. Astor y M.Tyrnauer  bajo el título Skyscraper Couture, que recreaba la famosa fotografía con varios arquitectos del momento ataviados con sus trajes o sombreros-edificios.

Skyscraper Couture (Vanity Fair. 1996). P. Jhonson y la PPG Tower, I. M. Pei y la Pyramide du Louvre, R. A. M. Stern y  un edificio para Disney, C. Pelli y la Carnegie Tower, Ph. Starck y el Tokyo Nani Nani y N. Foster en su HSBC Building. 

Pero la arquitectura como vestimenta no es patrimonio de los arquitectos, al contrario últimamente ciudadanos de todo tipo, estilitas de moda y artistas han tomado como referencia para sus disfraces de Carnaval, sus nuevas colecciones de vestir o sus creaciones artísticas, los rascacielos neoyorquinos.

Como ejemplo, los disfraces que recrean a King Kong y al Empire State, la colección para hombres del diseñador de moda R. Spencer publicada en 2008 en la revista Dazed, o la obra de la artista M. di Menna en ese mismo año que representa una persona embutida en el Seagram Building.

Disfraces de King Kong y el Empire State.    Diseño de R. Spencer (Dazed. Foto: B. Toms).   Obra de M. di Menna (2008)
    
Pero sin duda quien mejor ha expresado la capacidad sugeridora de Nueva York a través de sus edificios ha sido el artista español L. Úrculo con el vídeo Dear New York for Zara que realizó en 2012, con motivo de la inauguración de la tienda principal de Zara en Nueva York.


Fragmento del vídeo Dear New York for Zara. (L. Úrculo, Nueva York, 2012)

No obstante para quien quiera “re-presentarse” estos días, y lo expuesto no cubra sus expectativas, siempre le quedará recurrir a Les Costumes grotesques et les metiers, la obra en la que Nicolás de Larmessin (1640-1725) ilustra la “re-presentación del arquitecto”.


Habit de Architecte. Les Costumes grotesques et les métiers. Nicolás De Larmessin (1640-1725)



lunes, 10 de febrero de 2020

Arquitecturas zoo-lógicas. B. Lubetkin y el Tecton Group



Resulta como mínimo sorprendente que una importante aportación de la arquitectura “vanguardista” de los años 30 del siglo XX en Inglaterra se localice en los Parques Zoológicos de Londres y Dubley (West Midlands).  

En el año 1932, el arquitecto Bertold R. Lutbekin (1901-1990), recién llegado a Londres desde el continente, funda el taller de arquitectura Tecton Group con F. Skinner, L. Denys, S. Godfrey y L. Drake que recibe el encargo de proyectar la “casa de los gorilas” 1932-33) y poco después el “recinto-piscina para los pingüinos” (1933-34), ambos para el Zoo de Londres.

La primera la concibe como un moderno edificio compuesto por dos semicilindros, uno de hormigón y otro simplemente enrejado, en el que se podían deslizar parte del techo y de la pared permitiendo ampliar el espacio destinado a los animales, trasladando el recorrido de los visitantes del interior al exterior según la época estacional.


La "casa de los gorilas". Zoo de Londres (Lubetkin, 1.932-33)

Un edificio que contó con la colaboración del ingeniero Ove Arup, con el que el arquitecto siguió trabajando en proyectos posteriores, y que le sirvió a B. R. Lubetkin de aval para el posterior encargo y realización de la que sería su “obra icónica”, la Penguin Pool. 


La Penguin Pool. Zoo de Londres (Lubetkin, 1.933-34)

Frente a la idea de un falso naturalismo, la piscina de los pingüinos es concebida como un recinto oval perfectamente delimitado por un antepecho  que se convierte en muro perforado por grandes huecos o en una repisa de apoyo para los paneles explicativos protegidos por una marquesina que enlaza con el pequeño cuerpo construido para albergar en su parte inferior los nidos de las crías.


Planos y Vista aérea de la Penguin Pool. Zoo de Londres (Lubetkin, 1.933-34)

En su interior dos rampas helicoidales construidas en hormigón, sin apoyos intermedios, se entrecruzan limpiamente, por encima de una amplia piscina, convirtiéndose en las protagonistas del espacio.


La Penguin Pool en la actualidad.

El conjunto respira un aire de dinamismo, de tensión entre planos curvos, en el que se percibe la influencia “constructivista” de las escuelas de diseño Vjutemás (Moscú) y Bauhaus (Berlín-Dessau) con las que Libetkin tuvo contacto. Desde el año 2.004 el recinto está sin uso.


Poco después, entre 1.935 y 1.937, en el Parque zoológico de Dubley el Tecton Group proyecta la ordenación de los diversos recintos, construyendo la entrada, las cafeterías, unos pequeños quioscos y varios espacios para los animales, incorporando la topografía del lugar y el entorno a la geometría que caracteriza su intervención.


Entrada. Zoo de Dubley (Lubetkin y Tecton Group, 1.935-37)

El hormigón como material básico, las formas curvilíneas, el carácter autónomo de cada pieza y el uso de diversas plataformas que se interrelacionan con rampas, forman parte del lenguaje  común con la Penguin Pool del Zoo de Londres.


Quiosco. Zoo de Dubley (Lubetkin y Tecton Group, 1.935-37)
Recinto de los osos. Zoo de Dubley (Lubetkin y Tecton Group, 1.935-37)

El estado constructivo de los diversos elementos sufrió importantes deterioros, que en su mayoría han sido resueltos, aunque en el año 1997 el recinto de los pingüinos fue demolido ante el mal estado de la estructura por la afección del agua salada de la piscina.


Penguin Pool. Zoo de Dubley (Lubetkin y Tecton Group, 1.935-37)

Seguro que hay quien piensa que no es tiempo de hablar de las “arquitecturas zoo-lógicas”, pero como en tantas ocasiones el progresista cambio de sensibilidad sobre el sujeto de la arquitectura no puede anular la positiva valoración de unas soluciones que supieron responder desde la modernidad a las necesidades planteadas y que tienen un mayor recorrido cultural que su simple funcionalidad.

De no ser así tendríamos que empezar a olvidarnos de la historia y la cultura de las que somos sus hijos.

lunes, 3 de febrero de 2020

El Laberinto: construcción o ilusión


Hay quien dice que el atractivo del laberinto radica no tanto en encontrar la salida como en la posibilidad de perderte; que es tan interesante, o más, el recorrido que el destino.

La historia del laberinto podría ser así la historia del ser humano, de su paso por la vida, recreada con ideas y construcciones, textos e imágenes, objetos y sueños, entremezclados y que podrían ser tan diferentes o dispuestos en orden tan distinto como es habitual en nuestras vidas.


Del mito al rito …

Kylix , cerámica griega (s. V a.c.) y  Pavimento de la Catedral de  Chartres (s. XIII)
"-¿Lo creerás Ariadna? -Dijo Teseo-. El  minotauro apenas se defendió.” (J. L. Borges, La casa de Asterión, 1947). 



… siguiendo enigmáticos caminos ...

Cerebro humano y Placa de ordenador con circuitos electrónicos 
“Si el cerebro es imprescindible para salir de casa, la memoria es imprescindible para volver a casa." (J. Wagensberg, Per Laberints, 2011).


 … atravesando abstractos espacios ...

"Composición en línea" (P. Mondrian, 1917) y "Monumento a los judíos asesinados". Berlín (P. Eiseman, 2003-5)
“… el laberinto, antes que nada, es una imagen mental, una figura simbólica que no traslada a ninguna arquitectura ejemplar, una metáfora sin referencia, ...” (A. Peyronie, Dictionnaire des Mythes Litteraires, 1988).


 … que se convierten en lúdicos jardines ...

Jardín-Laberinto en Villa Pissani. Stra. (s.XVIII) y  Grabado de laberinto con representación de Eros (H. Sperling,s. XVIII)
“… la sensualidad impregna poco a poco el mundo de  los laberintos, que se convierten en un espacio para el juego, el coqueteo, los paseos y el placer. ...”  (J. C. Beltrán, Laberintos. Juego, ocultación y deseo en el jardín, 2014).


… a la entrada de inquietantes ciudades ...

Fragmento de vista aérea de la Medina de Marrakech  y Grundriss New Babylon über Slotemeer (C. Nieuwenhuys, 1961)
“Poco importa no saber orientarse en la ciudad. Pero perderse en ella, como quien se pierde en el bosque, requiere un aprendizaje.” (W. Benjamín, Infancia hacia 1900, 1982). 



… construidas con densos edificios ... 

Carceri (Piranesi, 1745-50) y Fragmento de la fotografía ParísMontparnase (A. Gursky, 1993)
“Parecen iguales, pero dentro viven personas diferentes” ( A. Gursky, comentario a una fotografía).



… que tienen innumerables puertas ...  

Juego "Laberinto de puertas" e Instalación  Forty-nine Rooms (Kuyuchul Ahn, 2007)
“ El Laberinto … hecho de habitáculos como si fuesen habitaciones, y cada una de estas habitaciones tiene cuatro salidas, una a cada lado, que llevan, cada una, a habitaciones similares a ésta, …” (Boccaccio).


 ... para acceder a infinitas salas y diminutas estancias ...  

Depósito de agua del Parque Joan Miró. Barcelona y Fotograma de la película Playtime (J. Tati, 1967)
“El universo (que otros llaman la Biblioteca) se compone de un número indefinido, y tal vez infinito de galerías hexagonales,… Desde cualquier hexágono se ven los pisos inferiores y superiores: interminablemente.” (J. L. Borges, La Biblioteca de Babel, 1941).


… ante cuyas paredes nos sentimos desorientados ...  

Fotogramas de las películas "El Circo" (Ch. Chaplin, 1928) y "La dama de Shangái" (O. Welles, 1947)
“El espejo me obligó, no sé cómo, a levantar los ojos y me notificó una imagen, no, una realidad, extraña a la concebiblemente monstruosa de la cual quedé impregnado contra mi voluntad, ahora el más fuerte es él y yo era el espejo”.  (R. Mª. Rilke).


Gif animado "Mirando hacia adelante" (F. T. Konczakowski, ) a partir de "Reproducción prohibida" (R. Magritte, 1937)

“El que sólo busca la salida no entiende el Laberinto, y aunque la encuentre, saldrá sin haberlo entendido.” (J. Bergamín, La cabeza a pájaros, 1934).


(La mayoría de las imágenes forman parte del estudio que realizamos en 2011 el equipo Periférica 33 (Aurora León, Martín Sáez, Victor García y José Miguel León) para una posible exposición sobre El Laberinto).