lunes, 26 de octubre de 2020

Una arquitectura inacabada: Las Escuelas Nacionales de Arte de La Habana

Pasados dos años del triunfo de la Revolución Cubana (1 de enero de 1959) Alexander Korda fotografía a Fidel  Castro y a Ernesto "Che Guevara" jugando en el Country Club de La Habana, elitista Club de Golf al que en su día se impidió el acceso al Presidente y dictador Batista por ser mulato.

Fidel Castro y Ernesto "Che" Guevara en el Country Club de Golf. La Habana (Foto: Alexander Korda. 1961)

Allí hicieron pública la idea de construir en aquel lugar las nuevas Escuelas Nacionales de Arte (Plástica, Danza Moderna, Ballet, Música y Teatro) destinadas a estudiantes de Asia, África y América Latina.

Ese mismo año el Proyecto se encargó al arquitecto cubano Ricardo Porro (1925-2014) y a través de él a los italianos Vittorio Garatti (1927-) y Roberto Gottardi (1927-2017), con los que había colaborado en Venezuela y compartían el apoyo a la nueva situación cubana.


Desde el principio tres conceptos marcaron las reflexiones y propuestas del equipo: la integración de los edificios en el entorno natural, la libertad en el diseño de cada una de las Escuelas y la utilización de un material y sistema constructivo común, el cerámico en muros y bóvedas a la catalana.

El resultado constituye un conjunto de arquitecturas que pueden crecer con el tiempo, distribuidos por el antiguo "green" y con una expresiva formalización, común y diferente a la vez, en la que las cubiertas conforman un nuevo paisaje.

Plano general con las cinco Escuelas (Desde arriba siguiendo las agujas del reloj: Artes Plásticas, Dramáticas, Danza Moderna, Ballet y Música (Fuente: wikiarquitectura)

Todos ellos comparten una rica secuencia de espacios, unos más abiertos (plazas y patios), otros que hacen de filtros (porches y  corredores interiores) hasta llegar a los más cerrados (aulas, talleres, salas, etc.)

En la Escuela de Artes Plásticas Ricardo Porro trata de reflejar la componente ‘negra’ de la tradición cubana trabajando con una serie de elementos autónomos, círculos y elipses, que enlaza con sinuosos pasos cubiertos por bóvedas y cúpulas.   
Escuela de Artes Plásticas. R. Porro. Planta y Vista del patio (Foto: J. M. León)

Porche y Paso entre aulas (Fotos: J. M. León)

Por el contrario, en la de Danza Moderna, el mismo arquitecto utiliza una traza más cuadrangular con violentos quiebros y aristas que parecen querer transmitir la tensión del momento. Su ruda geometría se traslada a la imagen del conjunto con la presencia de los nervios que segmentan las cúpulas. 

Escuela de Danza Moderna. R. Porro. Planta y Vista cubiertas (Fuente: skyscrapercity)

Aula y Sala de ensayos (Fotos: Äke E: Hijo Lindman) 


Vittorio Garatti plantea la Escuela de Música como un largo edifico de aulas y cabinas adaptado a la topografía, al que contrapone una importante pieza, más compacta, que englobaba las salas sinfónicas y de cámara, que lamentablemente no llegaron a construirse.

Escuela de Música. V. Garatti. Planta y Detalle fachada (Foto:  wikimedia commons)

Detalle fachada (Foto: Ivo Stani) y Galería exterior (Fuente: a+t Research Group)

En la Escuela de Ballet, también de Garatti, el planteamiento se aproxima al de la Escuela de  Artes Plásticas con el empleo de una geometría organicista. Destacan las airosas cúpulas, mientras  el ajuste de las bóvedas a la geometría en planta produce sugerentes efectos de luz y sombra.

Escuela de Ballet. V. Garatti. Planta y Vista cubiertas (Fuente: Habana Radio)

Galería interior  y Sala de baile 

Por último en la Escuela de Artes Dramáticas, Roberto Gottardi plantea un pequeño y denso núcleo con estrechos pasos que drenan el conjunto hacia el teatro situado en el centro. Dos agrupaciones de aulas (no realizadas), situadas a ambos lados creaban un nuevo espacio abierto hacia el río.

Escuela de Artes Dramáticas. Planta y Detalle fachada (Fuente: area-arch)

Paso interior (Foto: B. Murray. cubanartnews) y Sala al aire libre (Fuente: aplus.net. cubanartnews)

En resumen, una arquitectura que supuso una ruptura con el funcionalismo de los años 50, con influencias del organicismo y que introduce la historia y la tradición en su diseño, aproximándose a un singular “regionalismo crítico”.

Lamentablemente las difíciles circunstancias socio económicas creadas a partir del bloqueo de los EE. UU. y el cambio de la política cubana dejaron las obras sin terminar. Su reconocimiento internacional en los años 90 propició la reparación de una parte de la edificación existente (Escuelas de Artes Plásticas y de Danza).

La persistencia de su precaria economía deja pendiente la deseada finalización de un legado que ni Cuba ni la Arquitectura debieran perder. 

 





13 comentarios:

  1. Se ve maravilloso.Qué pena, qué pérdida. Mucho me temo que los tiempos venideros no van a permitir que nos ocupemos de ello.
    Maite.

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  2. Me lo temo yo también, aunque hace unos años hubo un intento entre el bailarín Acosta y el arquitecto Norman Foster para acondicionar la Escuela de Danza con el Gobierno cubano que no llegó a buen puerto.

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  3. Me encanta cuando se proponen arquitecturas libres y orgánicas... más nos hacían falta. Y quizás se podrían recuperar con imaginación y trabajo colectivo... en vez de intentos con estudios del star system, no te parece?

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    1. Hola Álvaro, realmente con lo que tiene de interés la reflexión que nos motivan las realizaciones de grandes arquitectos, los "star system", y quienes les imitan, parecen más preocupados por "el más difícil todavía" en una carrera sin fin que por atender al objeto y destino de su trabajo.

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  4. Que lastima, que un proyecto tan magnífico, no se haya podido terminar en su totalidad y ni poder conservar lo ya construido.

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    1. Hola "querida" unknown, coincido contigo. Recuerdo, cuando visitamos las de Artes Plásticas y de Danza Moderna, el orgullo de quienes nos las enseñaron por sus escuelas y la impotencia al ver como se degradaban las otras, pero realmente no tienen ni cemento para hacer la masa y colocar los ladrillos.

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  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  6. Un excelente trabajo, pocos cubanos creo que lograrían hacerlo con la profundidad que usted lo ha logrado. Y el foro muy animado.
    Así que un éxito grande.
    Este texto demuestra que La ciudad visitada es un blog que ya ha llegado a su mayoría de edad.
    Un abrazo

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    1. Gracias Narciso, viniendo de quien vienen estas palabras y de donde viene el que las ha escrito es todo un premio para "La ciudad visitada".

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  7. No sabes cómo me hubiera gustado ver está magnífica presentación de obras relacionadas con el arte y la cultura por artistas que han sabido fusionar aspectos arquitectónicos sutiles como pragmáticos. Una pena no pode tener un país fuerte que pueda mantener estas obras y seguir con el proyecto; pero Cuba no parece poder recuperarse y levantar cabeza .
    Gracias por tan elaborado y completo artículo, con espéndidas fotografias

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    1. Gracias Pilar por tu comentario. Comparto tus dudas sobre la posibilidad de que a corto, y quizás a medio plazo, Cuba pueda hacer frente a este y otras asuntos -seguro que tan importantes o más-. Y a largo plazo ójala otros lo puedan ver.

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  8. Desconocía el tema , y como siempre, tu estupenda explicación me ha encantado. ¡ Que bueno tener los comentarios de profesionales !

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    1. Gracias Covier por tu compañía. Es verdad que esta arquitectura y otras no menores, son muy desconocidas fuera de Cuba. Se nos ha trasladado interesadamente una imagen hecha de casas arruinadas de La Habana Antigua, insulsos edificios prefabricados muy deteriorados y aparatosos hoteles en la costa. Y eso es verdad, pero hay mucho mmás.

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