lunes, 14 de diciembre de 2020

El espacio arquitectónico en miniatura


Si bien la religión islámica no fomentó la representación figurativa del Creador ni de ningún ser vivo para evitar el culto a los ídolos, según algunos estudiosos tampoco la prohibió y fruto de ello existen algunos, y hermosos, testimonios.

El más importante lo constituye por su cantidad y calidad el conjunto de miniaturas persas, fundamentalmente las realizadas en el s. XVI, que narran múltiples historias donde los personajes y la arquitectura entremezclan su protagonismo.

A ello contribuyó la influencia del Próximo Oriente a través del imperio mongol (Persia fue invadida en 1219). Pero también, y seguramente de forma decisiva, el  hecho de que las miniaturas constituían un objeto artístico que se montaba en un álbum llamado muraqqa, de uso particular, que como tal no tenía difusión pública.

Muraqqa (Fuente: HiSoUR)

Precisamente su tamaño le confería ese carácter de algo privado, de haber sido pensado para ser disfrutado por pocas personas.

La temática desarrollada cubre un amplio espectro de escenas que recrean con detalle lo descrito en antiguos poemas y que van de lo sagrado a lo cotidiano, de lo palaciego a lo doméstico, de lo público a lo íntimo, generalmente desarrolladas en elaborados marcos arquitectónicos. 

Ilustración del libro de poemas Khamsa de Nizami Ganjavi (Adb al Samad. 1539-43) y del Iskandarnama o "Libro de Alejandro" (Kamal ud-Din Behzad. 1495)  

El esquema gráfico empleado se basa en la representación de casas, palacios y mezquitas con una falsa perspectiva que aplana el dibujo como si lo hubiese abatido sobre el papel, albergando varios fragmentos del relato en una página.

Ilustración del Hamzanama o “Las aventuras de Amir Hanza” (1570) y "El encuentro de los  Teólogos" (Abd Allah Musawwir.1540-50)

El resultado es una sensación de densidad y acumulación de espacios, a veces laberíntica, cuyos moradores parecen invitarnos a seguirlos a través de los diferentes lugares por los que se mueven o asoman. 

  "Alegoría de la embriaguez mundana" (Sultan Muhammad. 1531–33) y "Escenas de palacio" (Mir Sayyid Ali. 1539.43) 

En su reducido tamaño los interiores, representados como secciones de un edificio, se construyen con escasos muebles, pero sus pavimentos y paredes están finamente dibujados y a ellos se suman literalmente sus fachadas en las que aparecen balcones y cuerpos volados, cúpulas y lucernarios.

Ilustración de "Yusef y Zuleyka" en una sura del Corán (c. 1488) y "Matrimonio de Mihr y Mushtari" (Kamal ud-Din Behzad. 1523)  

Las ilustraciones se caracterizan por su naturalismo y los protagonistas están tratados realzando sus movimientos. Y no sólo se representan a los profetas o a la autoridad, entre ellos hay mendigos, barberos, bañistas, músicos o tenderos, muchos de ellos con rasgos orientales.

"Escena en el Hammam" (Kamal ud-Din Behzad. 1495) y "La historia de Haftvad y el gusano" (Dust Muhammad. c. 1540)

En resumen, cada miniatura es un pequeño mundo de escenas y arquitecturas, de personajes e historias que nos daría para recrear otras “mil y una noches”. 

6 comentarios:

  1. Estas obras de arte siempre me han parecido casi de otro mundo. Mi admiración por estos trabajos está en proporción a mi incapacidad ( casi infinita ) para realizarlos, porque si ya es dificil hacerlos, encima, el espacio para su ejecución es pequeño y por mas que los miro no lo entendiendo.
    Son una maravilla y merecida tu reflexión.

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  2. Comparto la opinion de Covier. Una maravilla y muy pertinente la muestra que presentas y la reflexion que haces de las bellas miniaturas persas q nos permiten disfrutar de este arte de una selecta minoría, realizado por dotados y habilidosos artistas que supieron conjugar la vida cotidiana con la arquitectura de su época. Encantada de seguir tus trabajos q nos ayudan a entender el Arte y nos alegran la Vida

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    1. Hola Pilar, a mí también me gustan mucho de las imágenes que reflejan lo cotidiano, las mujeres bañándose o los hombres en el hammám.

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  3. Me encantan. Son muy misteriosas y atren tipo komic. Me parecen un cruce entre pintura medieval El Bosco y Hervé. Tus reflexiones sobre el tema iluminadoras como siempre.
    Maite S

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  4. Gracias Maite S. Efectivamente, desde muchas de las manifestaciones arísticas de la Edad Media, pinturas, esculturas en las portadas de los templos o las tablas de sus retablos fueron verdaderas plataformas narrativas.

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